El pasado sábado el equipo Femenino del Campus Universitario de Ourense viajaba al campo de Manuel Anxo Cortizo (Lalín) a jugar la segunda jornada de la Primera División de la Liga gallega de rugby.
El renovado equipo, se presentaba ante las jugadoras de Lalín con mucha ilusión y muchas ganas;
A pesar de la derrota, el equipo de Ourense, no dejo de dar guerra ni un solo minuto, resultando el marcador definitivo de 32-24.
Se ponía por delante Lalín con un primer ensayo de la jugadora Rocío García, veterana jugadora de la selección española después de lucharles a las novatas del Ourense durante 20 minutos la disputa del balón.
El primer ensayo de las Ourensenas llegaba por parte de Sofía, la mediomelé portuguesa, que es una de los 10 nuevos fichajes de esta temporada. Además de Sofía, ensayarían para Ourense, Ceci y la otra novata Eva, flanquer del equipo.
Es necesario destacar la gran ilusión y la fuerza por parte de las chicas orensanas, que aunque novatas, mostraron una valentía ante un equipo bastante experimentado el Coreti Lalín que cuenta con al menos tres de las jugadoras que militaban el año pasado en el laureado equipo ourensano. Hay que recordar que el equipo femenino acabó segundo de la liga gallega y tercero en categoría nacional.
El nuevo entrenador Julio Lamana Soria, se mostró sorprendido, tanto por el resultado como por el entusiasmo de unas jugadoras que llevan menos de dos semanas entrenando juntas y que comenzaron casi de cero.
“Aún perdiendo se puede sacar de esa experiencia una enseñanza que en el futuro puede convertir esa derrota en triunfo”, dice el entrenador Femenino.
Destacamos que a pesar de haber perdido, las jugadoras ya están con ganas del próximo partido, Vigo será el próximo compromiso en el Campus Universitario el día 16 de noviembre
Por parte de Ourense jugaron:
Débora y Ana como pilieres, Tais como talonadora, Alma y Carlota segundas líneas, Eva y Laura flankers, Belén de ocho, Sofía medio melé, Rebeca apertura, Cecilia y Liliana centros, y Gael, Vega, Ayelen y Nieves de alas y Bea de zaguera.
Crónica de Liliana Villar Whyte
